CUANDO LAS PENITAS SON NUESTRAS Y LAS VAQUITAS SON AJENAS

Esta conocida metáfora de Atahualpa Yupanqui, que no habla de otra cosa que de las “desigualdades” ha disparado la idea de esta artículo que hace referencia al modo en que cada uno de nosotros se posiciona en la vida y digo esto en alusión a que somos nosotros los responsables de posicionarnos como “merecedores” de vaquitas algunas veces y no siempre solamente de las penas.
Las expresiones “tenés que hacer un sacrificio”, “no te quejes que bastante tenés”, “eso puede esperar, lo importante ahora es…”, son parte de lo expresado y sentido por algún otro, pero somos nosotros quienes tenemos la capacidad de posicionarnos en la vida en el lugar que sentimos o creemos merecer.
Puede pasar toda nuestra vida si nos quedamos esperando que algún otro se dé cuenta que merecíamos o esperábamos algo más y ese tiempo de espera nos irá colmando de sentimientos negativos que se irán acumulando hasta transformarnos en seres “resentidos” (re – sentidos), que volvemos a sentir (revivir) una y otra vez ese enojo de la postergación y de la frustración de no obtener lo que sentimos merecer.
Salí a buscar aquello de lo que te sientas merecedor, demandalo, hacele saber a ese otro que es eso lo que creés merecer , que es eso lo que querés y es ahora.
Dá a conocer que no estás dispuesto a continuar postergándote ni demorando la satisfacción de tus deseos y necesidades.
Convertite en un ser EGOTISTA, leiste bien, E G O T I S T A , un ser que se prefiere a sí mismo.
Deshacete del mandato de la ABNEGACIÓN y el SACRIFICIO como virtudes si no las sentís como tales.
Satisfacer tus deseos es virtuoso, es EGOTISTA y no te convierte en egoista.
No estás en el mundo para el altruísmo constante y el sacrificio por el otro, no podés amar al otro si no sabés darte amor a vos mismo.
No siempre las penitas deben ser tuyas y las vaquitas ajenas… en el mundo también hay para vos… sos parte de él…
Que no te convenzan de lo contrario, VOS SOS LO MÁS IMPORTANTE PARA VOS.
Clr. Analia Forti